Recuérdame. La historia detrás de la historia (parte 9)

Navidad y año nuevo...

Hoy quiero aprovechar la cercanía de estas fiestas porque se relacionan con mi novela.

Quienes hayan leído el primer capítulo de Recuérdame ya saben que comienza en año nuevo, minutos antes del cambio de año. Lo que no saben es por que elegí está fecha especial para algo tan importante como el comienzo de una historia.

Así como Armony Heart, la protagonista de Recuérdame, yo he sido criado en la fe católica, desde pequeño he celebrado las fiestas religiosas y siempre he disfrutado a pleno de la principal: la Navidad.

En casa siempre he sido el que ha armado el árbol navideño y es una tarea que me ha fascinado desde pequeño, esas luces parpadeantes, esos adornos y brillos tan especiales, ver el reflejo de las imágenes en las bolas y adornos espejados que cuelgan del árbol es algo que aún de grande disfruto. Tanto es así que nunca quiero desarmar el árbol de ese año y a esa labor la demoro tanto como puedo...

Es por eso que dos de mis personajes: Armony Heart y Daphne Reef son tan aficionadas a esta festividad.

Todos los preparativos: los regalos; las comidas navideñas, con sus sabores especiales y la música de los villancicos, que solo se escuchan en estas fechas, hacen que todos los días del mes de la Navidad sean especiales.

Y el último día de Diciembre viene fin de año, que es como cerrar un capítulo y comenzar el siguiente... que es justo lo que pasa en Recuérdame, y es por eso que precisamente es esa noche cuando comienza el primer capítulo. Me gustan las cosas simbólicas y este es un símbolo más de los que oculto en mi trama.

Para culminar esta entrada de mi blog, una vez más pondré un video de la talentosa y bella violinista Lindsey Stirling interpretando un tema navideño clásico: "La danza del hada de azúcar" (del ballet "El cascanueces" de Tchaikovsky).

Tchaikovsky, compositor y músico Ruso (1840-1893) puso música a un cuento "El cascanueces y el rey de los ratones", que nos cuenta la historia de una niña llamada Clara, que en la víspera antes de Navidad recibe un mágico regalo: un cascanueces con forma de soldado con su uniforme el cual, por la noche, cobra vida y que, junto con sus soldados, la defenderá del rey de los ratones y su ejército. El cascanueces finalmente resultará ser un príncipe que ha sido convertido en juguete por una maldición y llevará a Clara al reino de los dulces donde serán recibidos por el hada de azúcar.